Aceptar la ansiedad es fundamental para superarla
Como ya comentamos en el post anterior “Hola, ataque de ansiedad: ¡bienvenido!“, a ninguno de nosotros nos gusta experimentar ansiedad pero la aceptación de su presencia es fundamental para superarla. Aceptar la ansiedad implica dejar de luchar contra ella. Si no acepto, me quejo, me resisto, reniego de que esto esté sucediendo en mi vida. Aceptar la ansiedad implica dejar de resistirte a ella y dejar de verla como tu peor enemigo. La resistencia y la rigidez son actitudes internas que nos generan ansiedad, por tanto, no nos va a ayudar a reducirla.
Para poder aceptar la ansiedad, debemos saber que no es peligrosa y esto no lo vamos a poder saber si no te permites vivirla. Más que por una serie de ejercicios para controlar la ansiedad, debes empezar por sentarte y observar. De esta forma, te darás cuenta que la ansiedad no te hará daño mientras pasa por ti, sino que cesa sin generarte daño alguno.
Algunas técnicas y ejercicios para controlar la ansiedad
- Incorporar hábitos saludables: existen distintas áreas en las que si conseguimos una mejora, va a repercutir de manera muy positiva en nuestros niveles de ansiedad. Por ejemplo, mejorar la calidad de nuestro sueño, una alimentación saludable, realizar ejercicio físico para evitar el exceso de activación del sistema nervioso, etc. Por tanto, podemos iniciar observando estas áreas y planteándonos qué podemos incorporar/reducir en nuestro día a día que proporcione estas mejoras.
- Técnicas de relajación: incorporar unos minutos cada día a relajar nuestro cuerpo ofrece resultados muy positivos en el tratamiento de la ansiedad o depresión. Por ejemplo, el Mindfulness, es una técnica de meditación que te ayudará a conseguir la atención plena y a reducir tus crisis de ansiedad.
- Eliminar la percepción del peligro aparente. Esto lo podemos conseguir replanteando las interpretaciones o desviando la atención de los pensamientos y las imágenes no deseadas. Realizándonos una serie de preguntas podemos ir filtrando nuestro pensamiento negativo para detectar la evidencia, la gravedad o la utilidad de dicho pensamiento. Por otro lado, realizar tareas de distracción, nos permite no estar enfocados en los pensamientos o imágenes no deseadas.
- Vencer el comportamiento de huida. Cuando sentimos ansiedad, tendemos a evitar la situación que nos la provoca. Esto nos conduce a una gran incertidumbre y a la sensación de estar perdiendo el control de nuestra propia vida. La terapia hace exactamente lo contrario, es decir que nos entrena a enfrentarnos a aquello mismo que rechazamos o de lo que huimos. Por ejemplo, una persona que padece ansiedad social, se la entrenará para exponerse de forma eficiente a situaciones sociales motivo de su ansiedad.
Si aun así no puedes reducir tu ansiedad
Como has podido comprobar, empezando por la aceptación de los síntomas de ansiedad, existen numerosas técnicas y ejercicios para controlar la ansiedad que puedes poner en marcha desde este momento. Si sufres de ansiedad y crees que necesitas ayuda, no dudes en ponerte en contacto con nosotras. A través de una serie de pautas y ejercicios, podrás mejorar estos síntomas y tu calidad de vida. Desde Promethea, Centro de Psicología en Granada, podemos ayudarte. Recordarte que también disponemos de terapia online si consideras que es más pertinente para tu situación.