¿Qué es quererse a uno mismo?
Quererse a uno mismo es darse el respeto y el amor que todos merecemos. Significa tener en cuenta nuestras necesidades y aceptarnos en todas nuestras facetas, atreviéndonos a ser quienes somos. Implica también no juzgarnos y criticarnos por cada error que cometemos. A esto nos referimos también cuando nos preguntamos qué es el amor propio.
El otro día en una sesión, una paciente no estaba satisfecha en cómo había abordado una situación. Acto y seguido comenzó a hablar de sí misma con absoluto menosprecio. En menos de un minuto había utilizado diez adjetivos descalificativos. Ella no se estaba dando ni cuenta, porque es la forma habitual que tiene de tratarse. Le pedí que parase, y le dije si era posible que repitiese todas las palabras que había dicho sobre ella. Mientras las repetía, sorprendida, fui apuntando y colocando cada una de esas hirientes palabras en un post-it y me las fui colocando encima de mi ropa para que ella pudiese leerlas. No hizo falta un análisis posterior. Se quedó bloqueada emocionalmente y después se puso a llorar.
Esta forma de hablarnos tan frecuente, conlleva el desarrollo de una baja autoestima. Por lo que no nos sentiremos capaces de enfrentarnos a nuestra vida ni lucharemos con fuerza por aquello que deseamos. Al tener esta imagen tan empobrecida de nosotros mismos, basada en nuestro diálogo interno, puede que no nos sintamos dignos de ser amados. Damos por hecho que esa misma imagen que hemos creado sobre nosotros mismos es la que tienen los demás.
Cómo lograr sentirse bien con uno mismo
Ya sabemos que cada persona tiene unas necesidades y que recetas milagrosas no existen. Aún así, queremos daros algunas pautas que consideramos importantes para quererse a uno mismo. Éstas son:
1. Observa cómo te hablas. En momentos en los que has cometido un error o te sientes frustrado o culpable, párate a ver qué dice tu mente sobre ti. Para que puedas tomar más consciencia, escribe esas palabras en una libreta.
2. Cambia tu diálogo interno. Leyendo u observando lo que te has dicho a ti mismo, pregunta te cómo te sientes. Probablemente sientas emociones como: vergüenza, dolor, culpa.. ¿crees que una persona que se sintiera de cualquier de estas maneras tendría motivación para cambiar y mejorar su vida? Si la respuesta es que no, pregúntate: ¿de qué manera podría hablar a esta persona cuando siente que no ha hecho bien las cosas? Estoy segura de que si te imaginas que estás hablando así a una amigo o familiar no te costaría demasiado esfuerzo hacerlo.
3. Describe cómo te ves a ti mismo. Identifica y describe cuáles son tus cualidades y defectos en las distintas áreas de tu vida (académica/profesional, social, personal, física, emocional, etc.).
4. Fortalece tu autoestima. Refuerza los logros que consigas (no valores sin son grandes o pequeños). Piensa al final del día en una cosa de la que estés satisfecho.
5. Asume nuevos retos y no te conformes con lo que ya tienes. Plantéate cada semana algo nuevo a lo que quieres exponerte. Pequeñas metas. Identifica los obstáculos que no te permiten hacerlo y busca formas de saltarlos.
6. Permite que te elogien. Si no sabes que decir, no hace falta que digas nada, pero no rechaces que alguien valore algo de ti. El problema está en que tú no ves habilidades en ti no en que los demás las vean.
7. Practica la autocompasión. Permítete haber cometido esos fallos. No te definen, sólo forman parte de tu aprendizaje para conseguir nuevos propósitos.
8. Dedícate tiempo para ti mismo. No cumplas solo con las obligaciones del día, busca un momento para ti y haz algo que te apetezca, sin tener que dar explicaciones.
9. No complazcas a los demás para sentirte bien: si percibes que haces las cosas para que los demás se sientan bien y no porque realmente esté dentro de tu escala de valores, párate. Decide a quién quieres priorizar en ese momento y date cuenta de tus necesidades.
10. No busques razones para quererte: tienes que hacerlo para disfrutar de una vida que merezca la pena ser vivida por ti. Así que no pienses más y actúa.
Consecuencias de no quererse a uno mismo
Quererse a uno mismo es un reto diario y una apuesta de presente y de futuro por nosotros mismos. Si no lo hacemos no nos sentiremos bien con nosotros mismos y tendremos problemas de autoestima. Nos sentiremos inseguros y más inestables emocionalmente para enfrentarnos a muchas situaciones. Por lo que terminaremos atribuyendo los logros y lo valioso en los demás o en lo externo.
Sabemos que este trabajo personal es difícil. Si las pautas que os hemos dado os resultan insuficientes y necesitáis atención psicológica, desde Promethea nuestras terapeutas os pueden ayudar. Ofrecemos terapia online y terapia en Granada de forma presencial. Ponte en contacto con nosotras, estaremos felices de atenderte sin ningún compromiso.